Sector pesquero
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Definición
Acuicultura es el término general para definir el cultivo de peces y mariscos. En Galicia es muy característico el cultivo de bivalvos en bateas, siendo el predominante por volumen el cultivo del mejillón. El mejillón (Mytillus galloprovincialis) es un molusco bivalvo que presenta una característica forma de hacha, de color negro azulado en su parte externa. La vianda del interior es de color anaranjado (hembras) o blanquecino (machos). Se alimenta por filtaración y se reproduce dando lugar a unas larvas que se fijan al sustrato mediante unos filamentos denominados biso, fibras que crea el mejillón por la secreción natural de una proteína que se endurece en contacto con el agua. Esta particularidad se aprovecha para su cultivo, ya que gracias a su biso se fija en las cuerdas de las bateas. Hay un total de 3.337 bateas distribuidas en 5 rías (Ares-Betanzos, Muros-Noia, Arousa, Pontevedra y Vigo). De ellas es la de Arousa la que presenta mayor densidad, con casi el 70% del total.
Las bateas son estructuras flotantes fondeadas en las rías gallegas y atadas a uno o varios muertos mediante una cadena. Las dimensiones habituales son de 27 metros de largo por 20 de ancho, aunque también existen de 23x22 y de otras medidas. La normativa impide que una batea tenga una superficie mayor de 500 m2, aunque se aceptan los 540 por entenderse que los flotadores suponen una pérdida de la superficie útil. Un tipo de estructura frecuente es la de 6 vigas maestras y 12 vigas secundarias; las dos de los extremos se llaman látigos y los travesaños donde van colgadas las cuerdas son los puntones. Una batea no puede llevar más de 500 cuerdas ni éstas superar los 12 m de longitud. Existe una excepción en cuanto al número máximo: las cuerdas de cría, autorizadas de abril a septiembre, que se distinguen de las demás por ir amarradas con un chicote rojo, no contabilizan para el total. Generalmente las bateas están hechas de madera, mientras que los flotadores son metálicos. En la actualidad empiezan a hacerse bateas totalmente metálicas.
Este cultivo requiere la utilización de embarcaciones que permiten el transporte a las bateas y que están dotadas con una maquinaria auxiliar característica (grúa, tornillo, desgranadora, clasificadora, cinta transportadora, encordadora, tolva etc). Estas embarcaciones pertenecen a la 4ª lista y pueden alcanzar unas dimensiones de hasta 24 metros de eslora, caracterizadas por una obra muerta muy baja para poder saltar sin dificultad a las bateas.
El cultivo de mejillón es un proceso que varía a lo largo del año. Entre enero y marzo se realizan los trabajos de encordé de la cría (mejilla), que se obtiene de las rocas y de las propias bateas donde se ponen lo que se llaman “colectores”. El encordé se realiza a mano para dañar lo menos posible la cría debido a que es muy delicada y de pequeño tamaño. Para sujetar el mejillón a la cuerda se utilizan rollos de gasa que lo van rodeando y lo mantienen pegado hasta es capaz de sujetarse por si mismo a la cuerda.
Cuando las cuerdas están muy llenas, es necesario desdoblarlas, porque el mejillón va quedando sin nutrientes debido a la densidad y tamaño de los ejemplares y además el peso hace que se vayan desprendiendo de la cuerda.
DESCARGA DEL MEJILLÓN EN LA EMBARCACIÓN: Cuando el cestón llega a la embarcación, el mejillón aún está fijado a las cuerdas, por lo que es necesario soltarlo previamente a su descarga o procesado, operación que se realiza con el molinete de la grúa. Para ello el cestón se sitúa generalmente a popa de la embarcación y se pasa el cabo con gancho del molinete por el cepillo. Según el sistema, el cepillo se abre, se pasa y cierra, o bien si es fijo, el gancho y el cabo se pasan con el bichero.. En algunas embarcaciones, el proceso aún se realiza a mano, sacudiendo las cuerdas sobre la cubierta. Una vez suelto el mejillón, el cestón se abre bien sobre cubierta o bien sobre la tolva. Si se trata de mejillón de tamaño comercial que se va a vender a fábrica, el cestón se abre siempre en la cubierta y el tratamiento finaliza en este punto, ya que directamente se descarga al camión mediante la cuchara accionada por el brazo de la grúa.
PROCESADO DEL MEJILLÓN: Dependiendo del punto del ciclo del mejillón en que se encuentre o del destino comercial del mismo, al mejillón se le realizan una serie de operaciones. El mejillón debe ser retirado de las cuerdas. Para ello, éstas se enganchan con la grúa, se pasan por el cepillo para separar los mejillones, que van cayendo en el cestón. Cuando está lleno, el cestón se abre, depositando su contenido en una tolva o directamente en cubierta, donde bien mediante un tornillo o una cinta transportadora se va alimentando la desgranadora-clasificadora. Este equipo de trabajo se encarga de limpiar y desgranar el mejillón, y posteriormente clasificarlo, gracias a unas parrillas de distinto grosor.
1ª) Si se trata de mejilla (cría de mejillón sin tamaño comercial) la operación se realiza a mano, para no dañar la mejilla, en unas mesas provistas de rodillos, por donde se pasan las cuerdas.
2ª) La tolva, una cinta transportadora o un tornillo alimentan la desgranadora. Este equipo de trabajo separa las piñas de mejillón mientras lo va lavando. De la desgranadora cae a la clasificadora, que lo separa gracias a unas parrillas metálicas de distinto grosor. La clasificación puede ser manual o bien mecánica.
3ª) Si el mejillón es para desdoble (ya no se trata de cría pero aún no está listo para la venta), de la clasificadora cae en la encordadora, donde se vuelve a fijar a las cuerdas mediante unos rodillos de gasa.
4ª) Si el mejillón es para fresco, una vez que hayan alcanzado la talla comercial, se va metiendo en sacos. Para ello se ponen unos embudos metálicos en la salida de la clasificadora con los que se llenan los sacos de manera más fácil o también a través de una cinta transportadora donde cae el mejillón en la pesadora que ya está tarada para que se llenen los sacos con el peso estipulado. Una vez llegado a puerto, los sacos se colocan en palés, se aseguran con film y se descargan con la grúa.
5ª) Descarga: si va para fábrica, el mejillón se deposita directamente sobre la cubierta una vez procesado y una vez en puerto, se descarga en un camión con la ayuda de una grúa de cuchara.